
Convertida en una de las películas más queridas de Disney tras su estreno en 2002, ‘Lilo & Stitch’ tenía todos los ingredientes para resistirse al paso del tiempo: personajes entrañables, humor sin cinismo y una animación artesanal que respiraba autenticidad. Y así lo ha demostrado con secuelas y series de animación que han ampliado su universo y que han convertido a Stitch en el personaje más mono de Disney, por encima de Grogu incluso (no lo decimos nosotros, lo dice él). Sin embargo, la maquinaria de remakes del estudio no se detiene, y la versión live-action dirigida por Dean Fleischer Camp, responsable también de la maravillosa ‘Marcel, la concha con zapatos, llega con una consigna clara: mantener el corazón de la historia, aunque eso implique reordenar algunas de sus piezas.
Adiós al Capitán Gantu
En la película animada de 2002, el Capitán Gantu era una figura imponente: el antagonista por excelencia, encargado de capturar a Stitch y devolverlo al espacio. Su mezcla de fuerza bruta, torpeza y lealtad institucional ofrecía un contrapunto eficaz a la relación entre Lilo y su pequeño monstruo azul. En el remake, sin embargo, no hay rastro de él. Su lugar como villano principal recae en el Dr. Jumba Jookiba, el creador de Stitch, cuyo rol gana peso dramático. Pleakley, por su parte, mantiene su inclinación por ayudar a Lilo y Stitch, reforzando su lado más empático y cómico.
Cobra Bubbles se divide en dos personajes
Otro cambio significativo es la transformación del personaje de Cobra Bubbles, aquel ex-agente secreto con voz de Ving Rhames reconvertido en asistente social que combinaba una imagen ruda con una sorpredente calidez interior. En la nueva versión, su figura queda dividida entre dos personajes.
Por un lado, Courtney B. Vance interpreta a un agente de la CIA que investiga fenómenos extraterrestres; por otro, la evaluación de la custodia de Lilo recae en la Sra. Kekoa, una trabajadora social encarnada por Tia Carrere (voz original de Nani en 2002).
Nuevos personajes secundarios en la familia
El remake también introduce personajes inéditos como el interpretado por Amy Hill, que dio voz a la Sra. Hasagawa en la versión animada y que regresa con un nuevo rol: Tutu, una entrañable vecina de Lilo y Nani sin pelos en la lengua, que además resulta ser la tía de David, el interés amoroso de Nani. Según nos contó el director de esta nueva versión, su presencia refuerza la idea de comunidad dentro de la película, y por lo tanto da más significado a la palabra ‘familia’ (‘Ohana’) incluyendo a otros miembros que, como Stitch, se han unido a Lilo y Nani tras la muerte de sus padres.
¿Dónde está Elvis?
Al llegar a nuestro planeta y empaparse de nuestra cultura, Stitch queda prendado de la música de Elvis Presley. La película de 2002 nos muestra, en una de sus escenas más recordadas, al alienígena azul disfrazado con el atuendo blanco característico del Rey del rock e imitando sus movimientos. Tanto se asocia la figura de Stitch a la de Elvis que Disney ha publicado unas fotos promocionales de cara a este remake desde la mismísima Graceland, la casa del cantante en Memphis (ahora reconvertida en museo) donde podemos ver a Stitch asombrado por contemplarlas reliquias de su ídolo.
Sin embargo, en la nueva película esta obsesión por Elvis queda en un segundo plano, y solo hay una referencia a modo de guiño que se oculta tras los primeros créditos finales del filme.
La gran polémica del remake de ‘Lilo y Stitch’: el momento ‘trans’ de Pleakley, eliminado
Una de las decisiones más llamativas y polémicas del remake es la eliminación de un recurso visual icónico de la película original: los disfraces humanos de Jumba y (sobre todo) Pleakley. Jumba y Pleakley intentan camuflarse entre los terrícolas vistiéndose como ellos: él con ropa masculina extravagante, y Pleakley, pese a ser un personaje masculino, con vestido y peluca femenina. Muchos interpretaron este detalle como una muestra pionera de la representación trans en una película Disney, convirtiendo a Pleakley en poco menos que un icono LGTBQ+. Otros, criticaron que se usara el disfraz femenino como una herramienta de comedia.
En el remake, este recurso desaparece por completo. Dean Fleischer Camp ha explicado en distintas entrevistas que optaron por una solución tecnológica: «Solo puedo decir que lo intenté». En lugar de disfraces, los extraterrestres utilizan dispositivos para transformarse visualmente en humanos, algo que, según el director, funcionaba mejor en un entorno de acción real.
También mencionó que probaron versiones fieles al diseño original, pero no funcionaban del todo, y que, además, mantener esos elementos habría restado recursos al desarrollo visual de Stitch.
Fran Chico es experto en cine y series, especializado en divulgación cultural y crítica cinematográfica. Es crítico reconocido en Rotten Tomatoes y en Filmaffinity. Aunque su género favorito es el terror, lo mismo te habla del nuevo taquillazo del UCM de Marvel que de una película de autor a reivindicar del circuito de festivales. No hay serie de Netflix, HBO Max, Amazon Prime Video o Disney+ que escape a su radar, profundizando en el catálogo de cada plataforma para recomendar y analizar sus mejores contenidos.
Fran lleva más de un año escribiendo en Fotogramas, pero sus inicios se remontan a hace casi dos décadas en foros y blogs de cine como Planeta Claqueta o Moviementarios. Fue fundador y parte del consejo de dirección de la publicación digital de críticas y análisis fílmico Revista Mutaciones y miembro de la Asociación de Informadores Cinematográficos de España (AICE), la organización que otorga los Premios Feroz, así como votante de los Blogos de Oro al cine independiente. Después de cursar el Máster de Crítica Cinematográfica de la Escuela de Cine de Madrid (ECAM) impartido por Caimán Cuadernos de Cine, ha colaborado y/o cubierto como prensa especializada durante más de 10 años festivales de cine como San Sebastián, Sitges y Filmadrid, entrevistando por el camino a directores, actores y actrices relevantes de la industria nacional de la talla de Penélope Cruz, Carlos Saura, Ana de Armas, José Luis Cuerda o José Sacristán e internacional como James Wan, Edgar Wright o Dario Argento.
Sus conocimientos y su experiencia le han llevado a ser videoblogger de cine de Fnac España y director y presentador del podcast Holocausto Zinéfago, con más de 150 programas emitidos y disponibles en los que se mezclan el cine y el humor desde un punto de vista único y original.