Pocos actores tienen la voz, la presencia y la intensidad de Samuel L. Jackson, uno de los actores más reconocibles y prolíficos del cine actual. Colaborador habitual de cineastas como Quentin Tarantino o Spike Lee, el intérprete ha dejado una impronta inconfundible en todas las películas en las que ha participado durante una carrera que abarca más de cinco décadas. Por eso resulta llamativo, e incluso revelador, que, al ser preguntado en una entrevista de 2013 sobre qué película escogería para definir su legado, no citara ‘Pulp Fiction’, ‘Parque Jurásico’, ‘Star Wars. Episodio II: El ataque de los clones’ ni ninguna del UCM de Marvel.
Es habitual que los actores no elijan sus películas más populares como sus favoritas, como cuando preguntaron a Brad Pitt cuál es la mejor película de su filmografía y eligió el mayor fracaso de su carrera («La peor recaudación que he hecho») o cuando preguntaron a Tom Hanks cuál es la mejor película de su carrera y dijo una que nadie podía imaginar. Hace 12 años, durante una conversación con la revista Playboy, Sam Jackson abordó la cuestión de manera directa: «Si hubiera una película que quisiera que la gente viera, sería ‘Tiempo de matar’. Es una historia puramente estadounidense, muy sureña. Me gustaría que la gente la viera y dijera: ‘¡Dios mío!'»
‘Tiempo de matar’ (1996), dirigida por Joel Schumacher, es un drama judicial ambientado en el estado de Misisipi. Basada en la novela de John Grisham, la película cuenta la historia de Carl Lee Hailey (Samuel L. Jackson), un hombre negro que decide tomarse la justicia por su mano después de que su hija de diez años sea brutalmente violada por dos hombres blancos. El elenco, cargado de rostros conocidos (Matthew McConaughey, Sandra Bullock, Kevin Spacey, Donald y Kiefer Sutherland), y su sentida interpretación sirvió para que Jackson se afianzara como estrella en Hollywood tras los éxitos de ‘Pulp Fiction’ y ‘Jungla de cristal: La venganza’.
En esa misma entrevista, al hablar sobre su legado como actor y cómo querría que se le recordase, añadió: «Como un trabajador duro y, en general, que dio a la gente lo que valía su dinero. Eso es todo lo que quieres de una estrella de cine. Quiero decir, no estoy tratando de cambiar el mundo. Solo estoy tratando de entretener a la gente.»
Pero esa reverencia por ‘Tiempo de matar’ no ha impedido que también haya expresado su frustración por lo que pudo ser y no fue. En una entrevista más reciente con Vulture, Jackson fue contundente al explicar por qué no está del todo satisfecho con la versión final de la película. «En ‘Tiempo de matar’, cuando mato a esos tipos, los mato porque mi hija necesita saber que esos tipos ya no están en el planeta y que nunca más la lastimarán. Que haré cualquier cosa para protegerla. Así interpreté a ese personaje todo el tiempo». Sin embargo, según relata, muchas de las escenas que rodó para reforzar esa motivación fueron eliminadas en el montaje final: «En el proceso de edición, las eliminaron. Y al final parecía que después de matar a esos tipos planeaba cada movimiento para asegurarme de salirme con la mía. Cuando lo vi, estaba sentado allí como, ‘¿Qué mierda es esto?‘»
Jackson no oculta su decepción por lo que esas decisiones significaron para su carrera: «Las cosas que eliminaron me impidieron ganar un Oscar. Yo estaba como: ‘¿En serio? ¿Simplemente habéis eliminado esta mierda?‘».
El actor recuerda con especial dolor una escena que rodó el primer día de filmación: «Hice un discurso en una habitación con un actor y todo el maldito set estaba llorando cuando terminé. Pensé: ‘Ok. Esto va bien’. ¡Y esa mierda no está en la película!«. Rememorando lo sucedido, Jackson concluye con una reflexión amarga: «Sé por qué no está. Porque no era mi película, y no estaban tratando de convertirme en una estrella«.
Actualmente, ‘Tiempo de matar’ está disponible en Disney+ en España, junto a otras películas destacadas de Samuel L. Jackson como ‘El protegido’ y las películas del Universo Cinematográfico de Marvel en las que interpreta a Nick Furia.
Fran Chico es experto en cine y series, especializado en divulgación cultural y crítica cinematográfica. Es crítico reconocido en Rotten Tomatoes y en Filmaffinity. Aunque su género favorito es el terror, lo mismo te habla del nuevo taquillazo del UCM de Marvel que de una película de autor a reivindicar del circuito de festivales. No hay serie de Netflix, HBO Max, Amazon Prime Video o Disney+ que escape a su radar, profundizando en el catálogo de cada plataforma para recomendar y analizar sus mejores contenidos.
Fran lleva más de un año escribiendo en Fotogramas, pero sus inicios se remontan a hace casi dos décadas en foros y blogs de cine como Planeta Claqueta o Moviementarios. Fue fundador y parte del consejo de dirección de la publicación digital de críticas y análisis fílmico Revista Mutaciones y miembro de la Asociación de Informadores Cinematográficos de España (AICE), la organización que otorga los Premios Feroz, así como votante de los Blogos de Oro al cine independiente. Después de cursar el Máster de Crítica Cinematográfica de la Escuela de Cine de Madrid (ECAM) impartido por Caimán Cuadernos de Cine, ha colaborado y/o cubierto como prensa especializada durante más de 10 años festivales de cine como San Sebastián, Sitges y Filmadrid, entrevistando por el camino a directores, actores y actrices relevantes de la industria nacional de la talla de Penélope Cruz, Carlos Saura, Ana de Armas, José Luis Cuerda o José Sacristán e internacional como James Wan, Edgar Wright o Dario Argento.
Sus conocimientos y su experiencia le han llevado a ser videoblogger de cine de Fnac España y director y presentador del podcast Holocausto Zinéfago, con más de 150 programas emitidos y disponibles en los que se mezclan el cine y el humor desde un punto de vista único y original.
